Elaborado por: Ana Sofía Valencia, Ana Cristina Grajales, Juan Esteban Rivera, Kevin Varón Munera e Isabella Rivera.
Análisis Crítico teniendo en cuenta el texto de Adela Cortina y los resultados electorales, 2018.
Para comenzar, queremos definir lo que es la sociedad, un concepto clave en el desarrollo de este análisis. La sociedad como concepto general puede definirse como un sistema de interacción cultural, de interacciones sociales, conformado por un sistema de símbolos, valores y normas. Sin embargo, muchos autores se han tomado el tiempo de construir su propio concepto de sociedad, como lo fue por ejemplo el filósofo, Emile Durkheim.
Emile Durkheim decía que dentro de la sociedad el hombre se ve obligado a seguir ciertas reglas, siendo esta la definición de los sucesos sociales. Estas reglas consistirán en reglas anteriores y posteriores al individuo, que controlan sus acciones respecto a la sociedad a la que pertenece. Entonces el hecho social sería la coacción del individuo, subyugado a seguir unas normas impuestas sobre él desde su nacimiento y sin capacidad para modificarlas.En palabras menos técnicas se define básicamente, en que el comportamiento de cada individuo depende de la influencia directa que se nos da en la sociedad a la que pertenecemos. Siendo así, la sociedad, el control de nuestras acciones individuales.
Después de todo esto, nos surge una pregunta, ¿las leyes son la base de la organización de una sociedad, o solo son una excusa para la restricción de la libertad del individuo? Las leyes surgen a partir de la necesidad de organización de las sociedades, puesto que todos los seres humanos necesitan limitaciones, normas para convivir con el entorno y poder entrar en un marco social donde todas las actividades culturales que realizamos a diario, puedan desarrollarse correctamente. Si estas fuesen desapercibidas por las personas, cada quien se encargaría de hacer lo que le plazca, pensando en si mismo como propio beneficio, sin tener en cuenta las consecuencias que traigan sus acciones hacia los demás. Aquí surge lo que es el concepto del individualismo o ser individual, que se define como el conjunto de creencias, prácticas y valores culturales en los que el objetivo individual predomina sobre el objetivo colectivo. (Morales, López y Vega, 1992; Triandis, 1995) Este individualismo impide en cierto modo, el correcto desarrollo de muchas cosas esenciales de una sociedad, como lo es la civilidad. “Cuando esa es la clave ética de una sociedad, lo que es evidente que ocurra a continuación es que se merma totalmente toda capacidad de civilidad, esta queda totalmente socavada” (Cortina, 2003)
Es fundamental resaltar que el hecho de pertenecer a una sociedad nos convierte en ciudadanos que buscan como fin común lo justo. Pues serlo es un reflejo de nuestra imagen en la que se proyecta lo que somos, tanto lo que habitualmente se hace, como el respeto por el otro, consigo mismo, y todo lo que haga saber un poco del diario vivir, tanto si su acatamiento a la norma de ciudadanía es correcto o no debido. Para esto, también se debe tener un concepto claro y colectivo acerca de lo que es justo o no, y lo que es digno o no, para cada individuo.
Según Kant, se debe tener la capacidad para distinguir dos conceptos fundamentales “valor” y “dignidad”. Define la dignidad como un valor propio del ser moral, la cual no debe ser confundida con ninguna otra cosa.
“...lo más importante para una sociedad es el carácter de las personas que la componen, el carácter de sus organizaciones, el carácter de un pueblo” (Adela Cortina).
Dentro de una país es la rama legislativa es la encargada de realizar las leyes y normas en esa nación, en Colombia, existe el Congreso de la República el cual está divido en dos secciones, el Senado y la cámara de representantes, los cuales son de 102 y 166 personas respectivamente. En el caso de Colombia, el Senado es la cámara alta. A diferencia de la Cámara de Representantes (cámara baja), este es un cuerpo colegiado de representación nacional. Esto significa que los senadores son elegidos por ciudadanos de cualquier parte del país, a diferencia de los representantes, que son elegidos por territorios específicos.Este tiene poder encima de la administración y del gobierno. Las personas participantes son elegidas cada cuatro años. La importancia de esta reside en que es aquella institución capaz de reformar la constitución y todo lo que implica. Al ser un país con leyes, la democracia ha evolucionado y permitido a los ciudadanos escoger según su opinión aquellas personas que construyan dichas leyes.
El día domingo 11 de marzo en todo el país se realizaron las elecciones a Senado y Cámara, las cuales tuvieron como características que hubo un aumento en los votantes comparado con la elecciones del año 2014, fueron las primeras elecciones sin la presión de las FARC y con mayor visibilidad de las situaciones electorales en vez de problemas de violencia y conflicto armado en Colombia.
Por la redes sociales, recorrieron vídeos de corrupción y compra/venta de votos, lo cual es un hecho que se hizo más evidente sin la cortina de humo que proporcionaba las FARC y el ELN. Usualmente a la hora de vender votos se obtiene un bien por ambas partes, vemos que las personas reciben desde cargos en instituciones variadas, dinero y hasta comida y el favorecido de primera es aquel que ofreció el bien. Naturalmente se sabe que no es correcto esto porque solo se está favoreciendo a un candidato en el que no se confía por su capacidad y además de que no se está pensando para un futuro a largo plazo sino a uno de corto o mediano plazo. Los bienes obtenidos son pasajeros, pero una ley, un decreto o una decisión constitucional nos afectan a todos como unidad y como país, de ahí la responsabilidad que tenemos todos para ejercer nuestro derecho al voto y tomar con la seriedad que figura al caso. ¿Estamos mostrando un caso de hedonismo? “Cada persona siente que él y sus allegados son el centro de la sociedad, el núcleo de la sociedad. Y además, cada uno de ellos siente que tiene deseos, deseos de determinados placeres; los deseos son infinitos y cada uno entiende que él, sus deseos y la satisfacción de sus deseos constituyen la clave de su sociedad”.
Hablando sobre el abstencionismo de la población, se puede que disminuyó en un pequeña cantidad pero eso es algo importante. Creemos que las personas ya no confían en la política ni los gobernantes por múltiples razones, entre ellas que no hay una educación en participación política y tampoco se incentiva de manera constante ejercer el derecho al voto. en general a sociedad en la que vivimos no está ligada en todas sus esferas como para articular las situaciones de una esfera con otra, es decir, lo que compone la sociedad no está ligado entre sí. Aquí se hace énfasis en la importancia que Cortina menciona en el 2003 sobre la unión del sector social, empresarial y político. Si todos estos se unifican y se integran entre ellos tal vez la intensidad de la conciencia ciudadana aumentaría desde el factor educación por ejemplo y así potenciar el colectivo.
Como conclusión, es importante buscar tanto el bien propio como común. El placer, la necesidad, el querer, son facetas elementales por las que el hombre está expuesto para el cumplimiento de un dichoso deseo. Se hace énfasis en lo que esa persona anhela de manera íntima, dejando atrás lo que posiblemente haría un bien para una comunidad. Es ahí donde se entiende que posiblemente el hecho de votar está integrando una necesidad propia, además de reducir en una hoja y papel la opinión de quienes no pueden hacerlo. Es importante que el pueblo sea partícipe de todo aquello que espera regirlo, ya que de esto depende su futuro y el futuro de quienes prontamente vivirán. Tienen el gran poder de cambiar una sociedad para que cada día logre ser justa, con quienes la conforman, en cuanto al trato que se les da, independientemente de sus diferencias todos merecen ser dignos de un respeto.
A estos mismos que su opinión queda socavada, están a la mano de quienes puedes hacer que la sociedad logre avanzar, para ello, para que nuestros derechos y nuestras dignidades se hagan valer, se necesitan líderes justos, como ciudadanos justos capaces de elegir tanto por sigo mismo como por el otro, y hacer respetar ese derecho del cual ya es digno por ser humano.