Soy Breiner Garzón del grado 11º2
Relatoria:
Comenzamos la clase cuando el docente Marco ingreso al aula, teníamos un trabajo asignado el cual era como siempre revisar en la pagina que se iba a hacer en clase y leer la introducción del texto de bunge, Marco escucho a algunos compañeros que leyeron el texto y dieron algunas opiniones, sin embargo se tocaron distintos temas por el docente referente a la lectura como por ejemplo el circulo de viena el cual fue un organismo científico y filosófico formado por Moritz Schlick, filósofo austríaco, en Viena, Austria, en 1921 y disuelto definitivamente en 1936. Este movimiento, conocido con el nombre original de Círculo de Viena para la concepción científica del mundo, se ocupaba principalmente de la lógica de la ciencia, considerando la filosofía como una disciplina encargada de distinguir entre lo que es ciencia y lo que no, y de la elaboración de un lenguaje común a todas las ciencias, también se hablo de las teorías científicas según Karl Popper;La cual se basaba en la falsabilidad.
se menciono una cosa que se puede considerar sumamente importante la cual es que la ciencia es una herramienta y no es perfecta y como herramienta puede ser mejorable o complicada.
Se hablo de las preguntas que se vinculan al proyecto de investigación pero sin embargo rato despues de discutir sobre la vinculación de las preguntas que se vinculan al proyecto se toco la parte del texto donde bunge habla de que confía en la ciencia y frente a este comentario se comenzó un debate sobre confianza y fe como por ejemplo: la fe científica y la religiosa, varios compañeros aportaron sobre este debate como Maria José, Torres, Ospina, Luis, Emma, Isa y Cris el debate continuo casi hasta final de clase y acabos con las misma tarea de siempre la cual es revisar la pagina en el transcurso de la semana y ver que tareas o actividades se tendrían que hacer.
Opinión personal:
¿Desde cuándo los llamados Derechos humanos son producto de la cultura cristiana? Más bien, lo serán de una lucha endiablada contra la cultura cristiana, que es muy distinto. Si se nos apura, diríamos que la historia de Europa es la historia de la resistencia del individuo a la violencia del catolicismo como religión de poder. Y, desde luego, no fueron las cruzadas, ni los crímenes cometidos, derivados de la confusión entre teología y política, quienes produjeron la ilustración y, menos aún, los Derechos del Hombre.
Los valores, que ha fundado el Derecho, se deben a una lucha enconada contra quince siglos de civilización oscurantista, representada por el cristianismo. Lucha que supuso muchos miles de muertos debidos, precisamente, al poder religioso en connivencia con el poder político, ambos enfrentados a cualquier avance de la libertad individual.
La Iglesia aliada del Poder político ha sido la gran adversaria de la coexistencia pacífica entre los pueblos. La historia de las religiones si algo demuestra es que todas ellas han intentado imponerse por la violencia. ¿Por qué? Porque toda religión representa una amenaza para los otros, ya que ninguna está libre de integrismos
por lo tanto estaría mas en favor de la fe científica
consulta:
Recientemente se efectuó en Bogotá un debate entre el sacerdote colombiano Gerardo Remolina, S. J. y el biólogo británico Richard Dawkins. El encuentro fue de gran altura intelectual, a pesar de las diferencias, casi siempre irreconciliables, entre la fe y el pensamiento científico. El tema de la controversia (¿es Dios una ilusión?) generó notable interés entre creyentes e incrédulos, por igual.
Dado el enorme interés que despertó este evento, que vi en diferido, ¿no deberían también promoverse, a nivel mundial, millares de debates, no con ateos y devotos, sino con eruditos de las grandes religiones? Las diferencias entre Dios, Alá, Jehová y Brahman son bastante menores que las existentes entre los panelistas de Bogotá. Pienso que tales debates serían muy provechosos. Encontré poquísimos ejemplos de eventos semejantes en Google o YouTube.
Las discrepancias conceptuales entre el padre Remolina y el doctor Dawkins son muchísimo mayores que las que podrían existir entre un prelado cristiano y un teólogo musulmán, ambos creyentes en seres metafísicos y profetas elegidos. Los intercambios entre pensadores de los distintos credos bien podrían contribuir a mejorar la tolerancia inter-religiosa.
El doctor Dawkins es el ateo más célebre del mundo. En particular, admiro su teoría de la forma cómo pudo haber comenzado y evolucionado la vida, que magistralmente presenta en ‘El gen egoísta’, la obra que lo convirtió en celebridad científica. De esta teoría obtuve las bases para formular mi propia interpretación biológica del renacimiento budista.
¿Qué relación existe entre inteligencia y religión? Muy poca. En 1983, Howard Gardner publicó su reconocida y controvertida teoría sobre las inteligencias múltiples, con la cual propuso siete expresiones diferentes y complementarias de esta cualidad humana.
Años después, en revisiones de su propuesta original, el doctor Gardner concluyó que sus siete alternativas no daban cabida a mentes tan brillantes como Charles Darwin y Alfred Russell Wallace, los proponentes de la teoría de la evolución de las especies por selección natural. En 1998 resolvió entonces agregar una octava forma de inteligencia que denominó inteligencia naturalista, “la capacidad para identificar y clasificar los componentes del entorno”.
En las evaluaciones de su lista de inteligencias, el doctor Gardner también consideró la posibilidad de agregar una ‘inteligencia religiosa’. Pronto, sin embargo, dejó de lado la sugerencia, pues el acto de creer en seres etéreos o metafísicos no demanda exigencias intelectuales suficientes para justificar tal adición. Creer siempre es una tarea sencillísima, cuando no ingenua.
El padre Remolina, sin duda alguna, posee suficiente inteligencia naturalista para aceptar, como lo reconoció en Bogotá, la evolución darwiniana. El sacerdote también considera razonable que el universo actual en permanente expansión tuvo que ser alguna vez, por
‘extrapolación retroactiva’, algo muy pequeñito y que en algún momento debió producirse la descomunal explosión conocida como 'big bang'. No hubo pues divergencias entre los dos panelistas de Bogotá en cuanto a evolución u origen del universo.
Es necesario anotar además que alrededor de algunas hipótesis de la física moderna, los legos solo podríamos repetir sus enunciados, sin esperar comprender las ecuaciones inescrutables que respaldan tales teorías. Para la gente corriente, ‘creer’ en tales ecuaciones (por ejemplo, la hipótesis de que “el universo es matemáticas” de sueco-americano Max Tegmart o las controversiales teorías de las cuerdas) difiere poco de creer en Dios, Alá, Jesús o Mahoma.
Las personas que carecen de los conocimientos matemáticos requeridos para la comprensión de la teoría general de la relatividad o de la mecánica cuántica, pues… tienen fe en San Albert Einstein o San Niels Bohr. El padre Remolina, quien con certeza sabe más de ecuaciones que el ciudadano promedio, acepta con fe la realidad de Dios, de Jesús, del Espíritu Santo y del alma. Richard Dawkins, no. (Quienes nos inclinamos por el agnosticismo, estamos seguros de que ni las creencias religiosas ni la física cuántica son prerrequisitos para la armonía interior).
Ciertamente, los diálogos entre un creyente y un ateo son ilustrativos e interesantes. Las conversaciones entre los ateos, cuando no son sobre ciencia, con frecuencia terminan en burlas hacia los creyentes. ¿Qué podría ocurrir con los encuentros interreligiosos? Los intercambios desapasionados entre antagonistas de distintos credos, repetidos millares de veces por todo el planeta, bien podrían evolucionar hacia una convicción colectiva, lenta pero continua, de la inexistencia de entidades metafísicas.
https://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/gustavo-estrada/dios-religion-y-ciencia-y-sus-debates-170740